Un joven atormentado por pensamientos angustiosos y recurrentes le preguntó a un reconocido maestro:
- Si para hacer vida necesitamos vestirnos, si para subsistir necesitamos comer... ¿Cómo podemos escapar a la exasperación de tener que vestirnos una y otra vez, de tener que comer todos y cada uno de los días?
- Vistiéndonos y comiendo -respondió, tranquilamente, el maestro.
- No os entiendo -dijo el joven.
-Pues entonces vístete y come.